Confesión

Eres como la naturaleza

en su libre creación,

mis ojos brillan al mirarte...

y llenan de tristeza a mi pobre corazón.



A pesar que no me quieres...

y que tu a mí nunca me querrás,

mi corazón llora todo el día

al saber que nunca me amarás.



Dirás que soy un cobarde

por no decírtelo de frente,

me siento como un niño perdido

por el gran temor... que mi corazón siente.



No se ni como esto pasó,

el año pasado te quise olvidar,

y aunque tu no lo creas...

por poco lo llegué a lograr.



Y cada vez que quería decirte

me invadía en el alma el temor,

por eso no podía confesarte...

el secreto de mi gran amor.



Pero aquí solamente te digo,

Lo que personalmente nunca te diré,

pero te pido... ten presente...

que en esta vida yo siempre te amaré.